Por qué el que te hayan sido infiel es una bendición encubierta

Al final del camino, te sentirás agradecida de no estar amarrada a alguien que realmente no potenciaba tu vida.

Estar enamorado es algo maravilloso. El que te engañen es una mierd*. Pero, miremos el lado positivo de esto. Todos necesitan saber lo que es tocar fondo – el tipo de fondo donde el chocolate, el vodka, y Sam Smith se convierten en tus mejores amigos. Las personas te dicen “todo va a estar bien”, pero en tu cabeza no es así. No quieres nada más que envolverte entre tus frazadas y llorar dentro de un frasco gigante de Nutella.

Todo era tan perfecto, y ahora se ha acabado. Es una acumulación terrible de emociones y dolor. La belleza del amor rápidamente se convierte en una fea red de mentiras, engaño y angustia. Nunca te habían engañado, y es devastador. Sentirás un dolor que nunca antes habías sentido en tu vida. En tu mente, no es posible que haya algo que alguna vez te haga sentir como antes; nada nunca se comparará, y nunca estarás bien. Te sientes sola; sientes miedo, y no puedes encontrar consuelo.

Alejas a tus amigos porque ellos simplemente no entienden por lo que estás pasando. ¿Cómo podrían entenderlo? Seguramente nadie más se ha sentido tan mal en su vida. Pero demos un paso atrás, dejemos el tarro de helado a un lado, y miremos las cosas desde otro ángulo.

Necesitas enfocarte en mirar hacia adelante, en olvidar lo que has “perdido” y preguntarte a ti misma si realmente fue una pérdida. El logro más grande lo recibes al aceptar que no perdiste nada que tuviera algún valor real; simplemente te revelaron que estabas invirtiendo tu vida y tiempo en la persona equivocada.

Claro, vivieron momentos increíbles juntos pero, al fin de cuentas, estabas enamorada de alguien quien te hirió. Esta es una bendición. Recibiste una llamada de alerta y eres afortunada; este podría haber ocurrido dentro de 10 años. Sientes rechazo y disgusto ante la idea de que alguien pudiese hacerle esto a otro ser humano, pero todo está bien. Esto prueba que eres capaz de amar. Eres capaz de preocuparte por otro ser humano y de amarlo incondicionalmente. Eres incapaz de herir, incapaz de destruir emocionalmente a otra persona en la misma forma en que te han dañado a ti.

Sientes orgullo de ser diferente. Sabes qué es lo que mereces, y el saber esto hace que todo sea mucho más fácil. Siéntete agradecida por esto. Estás a punto de vivir las mejores y peores semanas de tu vida. Saldrás todas las noches intentando volver a sentirte “feliz”. Te aseguro que estas noches terminaran en lágrimas y conversaciones llenas de emoción por causa del alcohol, ¡pero por lo menos habrás ido a muchas fiestas! Y por esto, debemos estar agradecidos.

Saldrás de tu zona de comodidad; te expondrás y experimentarás cosas nuevas. Querrás escapar, y esto te llevara en un viaje de autodescubrimiento. En vez de acumular ira y dolor, celos o arrepentimiento, simplemente deja ir todo esto. Libérate de resentimientos y angustias, y usa tu dolor como catalizador para convertirte en una versión mejor y más fuerte de ti misma. Una versión de ti misma en la que tus intereses y ambiciones estén al frente de cada decisión que tomes y nunca te conformes; nunca aceptes derrotas o permitas que te digan que no eres capaz.

Se una mujer soltera. Disfruta tu propia compañía; disfruta de pasar tiempo sola, y aprende que la vida es maravillosa sin tener que dar explicaciones o sin las preocupaciones que son parte de una relación. Es sano el saber que puedes solucionar tus problemas tú sola. No te preocupes sobre lo que has perdido; preocúpate por lo que tienes. Cualquiera sean tus intereses o pasiones, concéntrate en ellas. Enfócate en las personas que importan y, lo que es más importante, no seas desconfiada; confía en todos hasta que demuestren que no merecen tu confianza.

Te sentirás agradecida de esta nueva energía que tienes, de esta nueva emoción por vivir, y un nuevo impulso para aprovechar al máximo cada situación o experiencia. La vida se tratará sobre ti. Tú lograrás cumplir los objetivos que TÚ te fijes. Te volverás más segura y sabrás que, sin importar lo que la vida ponga en tu camino, sabes que podrás superarlo.

Una vez que te has reconstruido a ti misma, serás incluso una mejor adición a la vida de alguien que merecerá más tu amor y tiempo. Un año después, compara tu vida anterior y la que tienes ahora: compara lo que has logrado, lo que has visto y hecho, y a quienes has conocido. Sin duda no habrá comparación.

Así que, a pesar de que a veces las cosas se vean muy, muy terribles en el momento, enfócate en el futuro y usa toda tu ira y dolor para alcanzar tus objetivos. Un día, muy pronto, ese “j*dete” se convertirá definitivamente en un “gracias”. 

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