Puede que cuando te des cuenta de lo que quieres, ya sea muy tarde.
Cierra los ojos por unos instantes, y piensa en la persona que te hizo sentir cosas que nunca habías sentido antes. Piensa en la persona con la que te gusta hablar por horas, incluso a altas horas de la noche. Quien siempre te sacaba una sonrisa o te hacía ver la vida de distinto modo. Piensa en la persona que se convirtió en tu mundo, y gran parte de tu vida. Esa persona que te hacía sentir en casa. Piensa en quien te cambió la vida. Estoy segura de que jamás te habías sentido tan bien con alguien, como te sucede con esta persona especial.
Déjame decirte que solo habrá una persona con la que sientas esto. No la dejes ir.
Hace 5 años, conocí a alguien que cambió mi vida. Alguien dulce, tierno, sincero y que tenía una infinita capacidad para amar y ver las cosas buenas de cada situación. Cuando estábamos juntos, no me importaba nada más. Puede sonar egoísta, pero he estado con muchas personas que me han hecho sentir muy mal. Y tener esto, con su calma y amor, me hacía sentir que lo tenía absolutamente todo. Jamás había sido tan feliz, y la dejé ir.
Cuando nos conocimos, yo tenía pareja. Mi relación nunca había funcionado y yo me empeñaba a creer que sí, por lo que vivíamos en un engaño. Simplemente no estábamos hechos el uno para el otro. Yo sólo deseaba acabar con esa relación, y no era capaz. Volvía a caer una y otra vez cuando me lo pedían. ¿Y lo que yo quería? Nunca se tuvo en cuenta. No éramos felices, no funcionaba, y no iba a funcionar en el futuro.
Un día, rompí con todas las cadenas de mi relación, pero ya era demasiado tarde para perseguir al amor de mi vida. Mi gran amor ya tenía muchas heridas y confusión. Y no supe cómo ayudar, cómo dejar que esos ojos claros que siempre me habían mirado con amor y vergüenza, dejaran de llorar. Hasta que apareció otra persona que sí supo cómo dar ese consuelo y amor, para este ángel.
Jamás me perdonaré no haber sido capaz de actuar a tiempo, de no aceptar lo que sentía. Jamás me perdonaré haber estado persiguiendo a otras personas con las que no tenía nada que hacer, porque no había ningún tipo de conexión.
Te daré un consejo: no dejes ir a esa persona especial, aún estás a tiempo. Aquellos con quiénes tenemos una conexión inexplicable, aquellos con quiénes todo lo difícil parece fácil, todo funciona… No los dejes ir jamás, porque harán de tu vida el viaje más hermoso.
A veces nos olvidamos que el tiempo es limitado y creemos que esas personas siempre estarán con nosotros, pero no. No lo estarán si no les damos la importancia que se merecen. Escríbele a esa persona,dile lo que sientes y, por favor, toma las riendas de tu vida.
Hazlo, porque para mí ya es demasiado tarde. Han pasado los años y aún sigo recordando como si todo aquello que pasé, hubiera sido un sueño.
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